El presidente de la Federación Aragonesa de Municipios, Comarcas y Provincias (FAMCP), Luis Zubieta, se ha reunido con el alcalde de Huesca, Luis Felipe, y con el presidente de la Diputación de Huesca, Miguel Gracia, para presentarles el informe sobre la evolución de los presupuestos municipales en Aragón entre 2008 y 2017 elaborado por la organización municipalista.
Del informe se desprende que los ayuntamientos de menos de 5.000 habitantes, que constituyen el 98% de los 731 municipios aragoneses y representan al 30% de la población de la Comunidad, vieron reducidos sus ingresos prácticamente a la mitad entre 2008 y 2015. El estudio concluye que la pérdida de su capacidad inversora contribuyó a agravar aún más los problemas de despoblación de gran parte del territorio aragonés.
Desde la FAMCP se considera que es urgente contar con una financiación municipal estable, necesidad que comparte el alcalde de Huesca, quien ha manifestado que “es fundamental que los municipios podamos contar con una financiación suficiente para acometer con garantías la financiación de los servicios públicos, máxime cuando queremos tener herramientas de lucha contra la despoblación”.
Tanto Luis Zubieta como Miguel Gracia coinciden en la necesidad de una administración local suficientemente bien financiada para afrontar las necesidades del día a día de sus localidades, sobre todo en aquellas más pequeñas que disponiendo de menos recursos humanos, técnicos y económicos, están cumpliendo con todos los requisitos marcados en materia económica-financiera por la Unión Europea y el Gobierno central. Pese a ello, las restricciones financieras y económicas ahogan a los pequeños ayuntamientos que no pueden disponer de sus fondos para reinvertirlo en las necesidades demandadas por sus vecinos.
En el encuentro con el presidente de la DPH se ha enfatizado sobre todo en las necesidades de los ayuntamientos de menos de 5.000 habitantes, que en la provincia de Huesca son prácticamente la totalidad: 195 de los 202 ayuntamientos. “Son estos ayuntamientos, los más pequeños, los que de verdad están haciendo un gran esfuerzo para mantener vivo un territorio y, por consiguiente, vertebrarlo”, ha dicho Miguel Gracia. Por su parte, Luis Zubieta ha argumentado que precisamente estos ayuntamientos son los que reflejan una fuerte caída de las inversiones directas y ha urgido a una financiación estable.
Ambos han explicado la necesidad de sumar esfuerzos y unir la reivindicación en este sentido. Para Luis Zubieta, “el trabajo de las diputaciones provinciales es imprescindible para con estos ayuntamientos pequeños y es la administración más próxima a las necesidades que plantean los municipios”. Tanto él como Miguel Gracia han recordado las necesidades más acuciantes para estos municipios: poder reinvertir el superávit en inversiones sociales, educativas y otras clave para el día a día de los pueblos, avanzar en la propuesta de la Federación Española de Municipios y Provincias sobre la modificación de la normativa de la regla de gasto y garantías de una mejor financiación y más estable.